Blockchain, el futuro del internet

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A pesar de que esta tecnología ha tomado protagonismo debido mayormente a las criptomonedas, esta es solo una de las múltiples aplicaciones que tiene. El hecho de que se pueda tokenizar prácticamente lo que sea, dentro de una red segura y transparente, hace posible su aplicación para reformular casi cualquier proceso o modelo. 

Tokenizar es representar un derecho, activo o dato en un token digital para que pueda ser intercambiado en una red de blockchain bajo estrictos controles de seguridad y transparencia. Este proceso consiste en digitalizar dicho activo junto con toda la información relevante sobre el mismo. Esto quiere decir que la información es guardada como un token en la blockchain, lo que permitirá que pueda ser intercambiado y manipulado dentro de la misma. 

La tokenización puede aplicarse prácticamente a cualquier cosa. Por ejemplo, un inmueble puede ser tokenizado como representación de la titularidad de este activo. Quien sea el dueño del token será el dueño del inmueble. 

Pero, ¿por qué́ es necesario esto? Porque reduce costos y ahorra tiempo. Estos tokens pueden ser vendidos y transferidos con gran facilidad, sin necesidad de un intermediario. Toda transacción realizada con un token queda grabada para siempre en la blockchain, lo que ofrece seguridad y transparencia. Por las propiedades de la blockchain, resulta casi imposible que este sea robado o manipulado sin autorización. Por lo que podríamos decir que un token en la blockchain es seguro, transparente, eficiente e independiente de cualquier entidad. 

También es posible fraccionar un activo en una cantidad fija de tokens, lo que permite que existan varios dueños de un mismo activo. Esto resulta útil como un vehículo de inversión, ofreciendo la oportunidad para invertir a personas que quizás no tienen el capital para adquirir el inmueble completo. Los propietarios de estos tokens podrían recibir luego los beneficios del alquiler o venta de dicho inmueble. 

Existen dos tipos de tokens, los fungibles y los no fungibles. Los tokens fungibles tienen las mismas propiedades y pueden intercambiarse en función de su cantidad, como por ejemplo las criptomonedas. Un bitcoin es igual a otro bitcoin. Los tokens no fungibles o NFT tienen propiedades únicas y no son sustituibles. Por ejemplo, una obra de arte digital única. 

Los NFT abren un mundo de posibilidades al poderse utilizar para representar activos únicos, donde gracias a la blockchain es posible verificar sus metadatos, su autenticidad, el histórico de transacciones y quién es su propietario. 

Toda esta mecánica es operada a través de contratos inteligentes alojados en la blockchain. Estos hacen posible ejecutar acciones de forma transparente, sin ningún tipo de intermediario. Una vez desplegados en la blockchain, su funcionalidad principal no puede ser alterada. Los contratos hacen posible automatizar tareas, definir protocolos y reglas de funcionamiento, realizar operaciones financieras y virtualmente todo lo que se pueda programar. Entre sus principales ventajas podemos destacar el ahorro de costos y tiempo, la transparencia, fiabilidad y autonomía. 

Es gracias a esto que, desde ya, la blockchain está impactando directamente algunos sectores claves como salud, comercio, cadena de suministros, banca, servicios públicos, minería, agricultura y transporte, entre muchos otros. Es muy probable que estas industrias logren un cambio significativo en el modo en que operan, haciéndose más eficientes, seguras y transparentes. 

La web 3.0 

La nueva fase del internet está basada en tecnología blockchain y ha sido denominada web 3.0. En sus inicios, la web estaba basada en mostrar información de forma unidireccional, es decir, el usuario solo podía acceder y consumir contenido estático sin poder interactuar con él. Aquí surgió la primera versión del lenguaje de programación web HTML, que permitía organizar y estructurar mejor la información que se quería mostrar en una página web. A esta fase se la llamó web 1.0. 

Luego, alrededor del año 2000, se introdujeron otras tecnologías e innovaciones que permitían al usuario interactuar con el contenido de una web, convirtiendo el internet en una plataforma colaborativa. De esta forma, los usuarios no solo podían consumir contenido, sino que también lo generaban. Esto abrió un mundo de posibilidades que permitió el surgimiento de plataformas como los foros, las redes sociales y demás, basadas en contenido generado por los usuarios. A esto se lo llamó web 2.0. Ahora, se está creando una nueva iteración del internet, la web 3.0, donde todo será descentralizado y los mismos usuarios serán los dueños del contenido. 

Tim Berners-Lee, el padre de la World Wide Web, la llamó «web semántica», por el hecho de que tendremos páginas webs más inteligentes, conectadas y abiertas, donde las máquinas procesarían el contenido parecido a como lo hace un humano, revolucionando cómo se muestra y cómo interactuamos con él. 

Con la web 2.0, los datos pertenecen a las entidades centralizadas desde donde son generados, lo que les permite comercializarlos para generar ingresos. Este es el caso de Facebook, Google, Twitter y Amazon. Este control de datos, que tanta polémica ha generado, no será posible en la web 3.0. En esta nueva fase de internet, los usuarios participarán en la creación del contenido y en la gobernanza de las plataformas, siendo parte incluso de las tomas de decisiones. La web 3.0 toma el control que tenían las plataformas centralizadas y lo distribuye entre los desarrolladores y usuarios. 

Además de la inteligencia artificial, el big data y otras tecnologías, la blockchain tendrá un rol protagónico en esta nueva fase, al ser el habilitador del concepto de descentralización de la misma, utilizando los tokens digitales, los contratos inteligentes y los criptoactivos. 

Las características nativas de la blockchain ayudarán a que todo esto sea posible. Por mencionar algunas, la transparencia, donde todo el código, las reglas y protocolos están disponibles públicamente; la seguridad e identidad, al estar atada a direcciones únicas cuyas transacciones deben ser aprobadas con protocolos criptográficos; la trazabilidad, al tener todo registrado en una cadena de bloques inmutable que permite retroceder en el tiempo y hacer consultas de cualquier tipo. 

Ya incluso se está hablando de la web 4.0, la cual usará inteligencia artificial para predecir y anticiparse a lo que necesita buscar el usuario, incluso antes de que lo haga. Las consultas serán realizadas mayormente mediante la voz, a través de objetos físicos conectados a internet con asistentes virtuales y los resultados serán servidos en dispositivos con realidad aumentada o mixta. 

Identidad digital 

Desde hace ya un tiempo se discuten diferentes propuestas de cómo debe evolucionar el concepto de identidad digital y cómo podemos aprovechar las nuevas tecnologías para establecer un nuevo modelo. A medida que dependamos más de sistemas digitales para prácticamente todo lo que hacemos, es imperativo encontrar un modelo apropiado para la nueva generación del internet. 

La transformación digital y la web 2.0 nos han permitido crear nuevos modelos de identidad digital, haciendo posible interactuar y colaborar en plataformas digitales. Podemos crear una cuenta de correo electrónico que nos sirva luego para acceder e identificarnos en diferentes plataformas en línea. Con ese correo, podemos crear un perfil social y crear una reputación en línea basada en nuestra participación en redes sociales. El inconveniente con este modelo es que tendremos que crear una cuenta nueva en cada plataforma a la que necesitemos acceder, muchas veces con contraseñas y correos diferentes. Esto, sin mencionar el hecho de que los datos que generemos se quedarán en esas mismas plataformas y no tendremos control sobre estos. 

Existe también el problema de que una misma persona puede crear múltiples perfiles y cuentas, lo que hace imposible determinar cuál es real o ficticia. En el año 1999 Microsoft lanzo la iniciativa Microsoft Passport como una propuesta para solucionar la problemática de múltiples cuentas de usuario. La idea era proveer una solución de identidad que pueda utilizarse en cualquier servicio de internet.¹ Pero centralizaba todo el control en los servidores del mismo Microsoft. Luego, en el 2001, Sun Microsystems lanzó Liberty Alliance, un proyecto similar pero con el control distribuido entre varias instituciones. Igual, los datos personales del usuario quedaban en control de cada uno de los servicios utilizados. Más adelante surgieron otras iniciativas con el concepto de crear una identidad digital que sea «user-centric», fuera del control centralizado de una o varias entidades. Algunas de ellas fueron el Open-ID y el Web of trust initiative, esta última con criptografía asimétrica, similar a la que utiliza la tecnología blockchain. Estas iniciativas no progresaron porque tenían como base el uso de correos electrónicos, centralizando otra vez el control en instituciones como el ICANN, encargada de administrar los dominios de internet.² Hoy en día tenemos soluciones similares para facilitar el acceso a diferentes servicios digitales, de empresas como Facebook, ahora Meta, Apple, Twitter, Google y Amazon. Utilizando un Social login o acceso por redes sociales, podemos acceder con una misma cuenta de usuario a servicios en línea sin tener que registrarnos. Aunque esta interesante innovación le facilita la vida a los usuarios y los comercios pueden ahorrarse costos y tiempos de desarrollo, deja el control de nuestra identidad y todos nuestros datos en manos de las principales plataformas. Datos que son luego utilizados por algoritmos para impactarnos con publicidad y recomendaciones personalizadas. 

Con el surgimiento de la tecnología blockchain se retomaron estos esfuerzos para crear un modelo que utilice la criptografía de llave pública para identificarse sin necesidad de un correo electrónico. Y es que esta cumple con todas las características requeridas, como descentralización, trazabilidad, interoperabilidad, transparencia e inmutabilidad. De aquí surge la propuesta del Self-Sovereign Identity presentada por Christopher Allen, la cual cumple con las siguientes características: el usuario controla sus datos personales, los algoritmos que controlen el sistema deben ser transparentes, los datos que genere la identidad en un servicio deben ser portables a otros servicios y el usuario debe ser quien valide el uso y acceso a sus datos.³ Esos principios han sido incorporados en muchas otras iniciativas similares con el objetivo de crear un estándar abierto que pueda ser utilizado a nivel global. Estas soluciones descentralizadas de identidad pueden proveer opciones centradas en el usuario, otorgando mayor privacidad y control sobre nuestros activos digitales y datos. En términos simplificados, un usuario puede generar una dirección única que lo identifique. Esta dirección le serviría para acceder a sus activos digitales (tokens), registrados en la blockchain. Solo con su validación será posible hacer transacciones con sus activos digitales. Con esa misma dirección, podrá acceder también a cualquier servicio digital, siempre validando el acceso a sus datos (guardados en la blockchain). Todo el histórico de sus transacciones y accesos estará disponible siempre en la blockchain. 

Pero, ¿qué pasa si un usuario tiene múltiples direcciones, o si pasamos algún token que nos identifique a otro usuario? Para esto, el fundador de Ethereum, una de las principales redes de blockchain, ha anunciado el concepto de soul bound tokens (SBT) o «enlace al alma», que son NFT que están atados a una sola dirección de usuario, por lo que no pueden ser transferidos o comercializados. Su propósito es actuar como acreditadores de logros o hitos de la vida real, con el objetivo principal de servir como una identificación digital.⁴ Para simplificar el concepto podemos poner el siguiente ejemplo. «Juan Pérez» crea una dirección para transaccionar en la blockchain y acceder a servicios en línea. Luego de un tiempo, Juan puede crear otras cinco direcciones y acceder a los mismos servicios como «otro usuario». Hasta el momento, era imposible crear un sistema donde podamos identificar a un usuario de la vida real con una sola dirección. Pero si se genera un soul bound token que lo identifique como «Juan Pérez, 35 años de edad, nacido en Santo Domingo, República Dominicana» y cualquier otro metadato que se necesite agregar, esta dirección pertenecerá a Juan para siempre. Con esta podría luego validar su identidad en servicios en línea. Incluso podría servir como sustituto a nuestros métodos actuales de identificación con los gobiernos. Podría sustituir nuestro pasaporte, licencias, certificados de estudios y registro de vacunación. Podríamos acceder a nuestra cuenta de banco, nuestros perfiles sociales o al gimnasio. Los programas de fidelidad de las empresas podrían estar atados a este token. Las posibilidades son infinitas. La identidad digital es uno de los principales retos a solucionar que tiene la tecnología blockchain, y todo parece indicar que la solución está cerca. 

Organizaciones autónomas descentralizadas (DAO) 

Las redes de blockchain están retando la forma en que las sociedades y las empresas se organizan. Ahora es posible crear una estructura descentralizada y autónoma para coordinar de forma segura a personas e instituciones, aunque no se conozcan ni se tengan confianza. Esto es lo que se logra con las organizaciones autónomas descentralizadas (DAO, por sus siglas en inglés), las cuales son entidades creadas en una blockchain, generadas, controladas y poseídas colectivamente por sus mismos miembros. Permiten establecer una organización que pueda funcionar sin una gestión jerárquica. Están formadas y controladas a través de contratos inteligentes complejos, los cuales registran y formalizan las reglas por las cuales se regirá dicha organización. El protocolo para la toma de decisiones está descrito en estos contratos y es necesario contar con la validación y participación de la mayoría de los miembros de dicha organización para realizar cualquier cambio o ejecutar una acción. Esto garantiza una estructura horizontal sin una jerarquía definida. 

Las DAO utilizan tokens digitales que sirven para otorgar derecho a voto a los usuarios miembros. Los tokens podrían utilizarse también como recompensa por la participación para los mismos usuarios miembros. 

Este tipo de organizaciones permiten: 

– Reducir el problema del agente-principal. Este hace referencia a aquellas situaciones en las que un actor o entidad, en este caso el «agente», afecta la situación de un tercero, o el «principal», mediante toma de decisiones. Generalmente sucede cuando el «agente» persigue sus propios intereses sobre los del «principal». Un ejemplo de esto podría ser cuando los gobiernos imponen medidas que impiden la libre competencia para beneficiar a determinadas industrias, afectando los intereses de los consumidores.⁵ 

– Incentivar a los participantes con tokens digitales para eliminar intermediarios y reducir costos administrativos.
– Reemplazar el sistema jurídico por mecanismos automatizados y seguros que hacen inviable un incumplimiento contractual. 

Pongamos un ejemplo en el ámbito político. Para la toma de decisiones de un gobierno podríamos tener una DAO donde los ciudadanos sean los que aprueben y validen las propuestas a ser implementadas. Este sistema de votación podría estar atado a identidades digitales definidas por un soul bound token de forma que se garantice que solo los usuarios autorizados sean miembros de esa DAO y puedan ejercer el voto. 

El bitcoin, que aunque no se considera realmente una DAO fue el primer ejercicio de una organización descentralizada autónoma, ya que mediante la red de participantes se coordinan todos los cambios al protocolo de este criptoactivo. Las reglas de gobernanza están atadas al mismo token bitcoin. Luego de que surge la red Ethereum se hace posible programar contratos inteligentes para crear DAO. Con la gobernanza a través de tokens se hace posible reemplazar el modelo de organizaciones top-down con código autoejecutable.⁶ The DAO es uno de los primeros ejemplos de organizaciones autónomas descentralizadas con contratos inteligentes complejos. Se creó en el año 2016 como una vía para participar en un fondo de inversión sin la estructura tradicional de administración de fondos. Cada dueño de token participaría en la toma de decisiones de inversión y recibiría un retorno proporcional a la cantidad de tokens que tenga. Se recaudaron 150 millones de dólares. Sin embargo, debido a errores en el código unos hackers pudieron robar 50 millones de dólares del contrato. Pero, aunque este primer ejercicio no resultó exitoso, marcó un inicio a las infinitas posibilidades de este tipo de estructuras. 

Otro ejemplo es el Maker DAO, que surgió con el propósito de crear una comunidad que ejerza la gobernanza sobre una moneda estable de escala mundial. De aquí surge la primera stable coin, o moneda estable, llamada DAI. Quienes invertían en este protocolo participarían en la toma de decisiones y serían recompensados con la misma moneda estable. Entre otras cosas, las monedas estables se utilizan para la cobertura contra la volatilidad del criptoespacio. 

Se puede crear una DAO de prácticamente lo que sea, y por sus propiedades de transparencia y participación descentralizada promete un gran futuro en la forma en que nos organizamos. Pero estas estructuras aún no son perfectas. Todavía existe un gran riesgo de que por errores humanos en el código de los contratos puedan ser penetrados y alterados. Tampoco son 100% descentralizadas al depender casi siempre de un grupo de personas que se encarga del desarrollo del mismo código y su mantenimiento. Una vez sean incorruptibles y totalmente autónomas, cambiarán al mundo. 

Disrupciones en todas las industrias 

Casi todas las industrias están experimentando transformaciones relevantes. Ya somos testigos de un gran número de innovaciones que están permitiendo hacer procesos más efectivos, transparentes y seguros. 

En la industria financiera se ha creado el concepto DeFi o finanzas descentralizadas, donde se ofrecen servicios financieros con mayor transparencia. A través de contratos inteligentes se realizan préstamos en criptomonedas y se ofrecen inversiones con retornos de inversión mediante staking. Aunque las DeFi permiten realizar operaciones sin necesidad de una entidad centralizada, ahorrando costes y tiempo, la seguridad sigue siendo un punto de mejora importante. Al momento de escribir este artículo existen alrededor de 60 billones de dólares colocados en instrumentos financieros decentralizados.⁷ Los principales bancos del mundo, incluyendo JP Morgan Chase, Goldman Sachs, Santander y BBVA, están experimentando con la tecnología blockchain para realizar pagos transfronterizos en tiempo real y para saldar transacciones entre las mismas instituciones bancarias. Esto les permite reducir costos y ahorrar tiempo de forma segura y eficiente. 

Desde el año 2020, el arte y los coleccionables se han beneficiados por el auge de la demanda de los NFT, los cuales les han permitido a artistas y emprendedores distribuir sus creaciones como activos digitales únicos registrados en blockchains. Según un estudio publicado por el medio Coindesk, el mercado de los NFT podría alcanzar los 35 billones de dólares al cierre del 2022 y alrededor de 80 billones de dólares para el 2025.⁸ Importantes marcas como Adidas, Visa, Coca Cola, Gucci, Nike, TIME Magazine, Budweiser, McDonalds, NBA y muchas otras ya han lanzado o han participado en proyectos de NFT. 

El tan mencionado metaverso no es un concepto nuevo, este ha tomado popularidad en los últimos años por el hecho de que la tecnología blockchain y los NFT le han agregado la posibilidad de que un usuario pueda ser dueño de los activos digitales presentes en el mismo, algo que antes no era posible. Esta industria, a la que Meta (Facebook) está apostando su futuro, se estima que tendrá un valor de mercado de más de un billón de dólares en los próximos años.⁹ En un estudio realizado por Gartner, se estima que un 25% de la población pasará al menos una hora al día en el metaverso.¹⁰ El crowdfunding o recaudación de fondos en línea fue creado para financiar ideas de empresas o causas sociales, y se ha elevado de nivel al introducir la tecnología blockchain para hacer las recaudaciones sin ningún tipo de intermediario. Ahora es posible otorgar un token digital como recompensa a los que aporten dinero, en forma de criptoactivo, para desarrollar una iniciativa. Esto permite que los fondos recibidos y las recompensas prometidas a los inversionistas sean regidos y ejecutados mediante contratos inteligentes. 

La industria de los seguros está utilizando la tecnología para que las aseguradoras puedan crear bases de datos inmutables y puedan realizar mejores evaluaciones de riesgo y pagos de siniestros más rápidos. 

Para las donaciones, el uso de criptoactivos permite rastrear con precisión a dónde van los fondos, cuándo llegaron y en manos de quién terminaron. 

Uno de los casos de uso más exitosos se ha dado en las cadenas de suministro. El registro de activos físicos, como por ejemplo las piezas de automóviles, en una cadena de bloques es un excelente ejemplo. Es posible rastrear desde el proceso de fabricación y envío de cada una de las piezas con las que se arman las partes de un vehículo, incluyendo el registro de cada uno de los puntos por donde pasaron antes de llegar a donde serían ensambladas. Esto resulta de gran importancia para evitar falsificaciones y para identificar piezas específicas que necesiten luego ser cambiadas. 

Por otro lado, con el auge del internet de las cosas, la blockchain jugará un papel importante para asegurar la comunicación segura entre objetos conectados. Si cada objeto tiene su identidad única en una blockchain, la manipulación será casi imposible. 

En bienes raíces se podrá registrar, rastrear y transferir títulos de propiedad, ayudando también a que los documentos sean más fáciles de verificar. Lo antes mencionado sobre tokenizar propiedades pone a disposición una herramienta que puede catalizar la inversión en cualquier tipo de inmuebles. 

Finalmente, ¿Qué sería más efectivo para un sistema electoral que para votar a todos los ciudadanos se les requiera firmar una transacción en la blockchain validando su soul bound token? Eliminaríamos casi toda posibilidad de fraude en unas elecciones. 

Limitantes 

Las innovaciones y casos de uso son tantos que no cabrían en estas páginas. Todas las industrias se verán impactadas por esta tecnología de una forma u otra. Pero todavía existen algunas limitaciones que debemos superar. 

1. Experiencia de usuario 

La experiencia de usuario debe mejorar. La gran mayoría de las herramientas actuales para interactuar con las blockchains requieren de cierto nivel de conocimientos técnicos. Esto hace que el porcentaje de adopción y uso de aplicaciones descentralizadas todavía sea muy bajo en comparación con el total de usuarios en internet. Este es un reto a trabajar para lograr una adopción masiva. 

2. Llaves privadas y estafas 

Un punto de fallo crítico es la pérdida de las llaves privadas que se usan para acceder a la cartera del usuario. Sin estas es imposible recuperar los activos digitales que estaban en una cuenta específica. Esto requiere tener protocolos para guardar las llaves privadas de forma segura fuera de lo digital. Imagínese perder todo y no tener ninguna forma de recuperarlo. Para resolver esto se está evaluando la propuesta de un social recovery o recuperación social, donde existan otros usuarios con permisos para recuperar la llave privada del primer usuario. Se requerirá que dos o más de estos usuarios validen la recuperación. El mismo hecho de que es necesario un cierto nivel de conocimiento técnico también es una de las razones por las que una gran cantidad de usuarios caen fácilmente en estafas de phishing, firmando transacciones con su cuenta que luego resultan en el robo de sus activos. 

3. Vulnerabilidades en el código 

Por otro lado, aunque tengamos ya varios años trabajando con diferentes blockchains, aún estamos en una etapa de exploración e iteración, de prueba y error. Los NFT y las DeFi han generado un incremento importante de usuarios en poco tiempo. Este crecimiento acelerado ha causado una explosión de nuevas propuestas y plataformas, donde por la misma rapidez de salir al mercado se lanzan productos con numerosas vulnerabilidades en el código de los contratos inteligentes. Esto ha hecho que los hackers aprovechen la oportunidad para explotar estas fallas, ocasionando pérdidas de alrededor de 3.2 billones de dólares en 2021 y alrededor de 2 billones en la primera mitad del 2022.¹¹ Aún es necesario fortalecer los protocolos y los contratos inteligentes para cerrar posibles brechas de seguridad y que así tengamos un ambiente seguro. 

4. Escalabilidad y costo por transacción 

Otro tema importante a mejorar es la escalabilidad. Algunas blockchains tienen limitaciones en la cantidad de transacciones por segundo que pueden realizar, lo que impide que puedan operar a gran escala. La red de Visa, por ejemplo, puede realizar alrededor de 56,000 transacciones por segundo. Algunas blockchains solo pueden realizar entre 7 y 8 transacciones, otras como XRP Ledger pueden realizar unas 1,500. Además, algunas redes de blockchain tienen un alto costo por transacción cuando hay muchas transacciones simultáneas. Este es un punto importante de mejora para llegar a la adopción masiva. 

5. Consumo de energía 

Por último, el polémico tema del consumo de energía de los nodos que mantienen las redes de blockchain. Según la web Digiconomist.net, las dos redes principales, Bitcoin y Ethereum, consumen alrededor de 300 Twh. Más de lo que consume un país como España en un año. Pero para esto existen soluciones que incluso ya se están implementando. La red de Ethereum, por ejemplo, cambiará su protocolo de consenso de proof of work a proof of stake, lo que le permitirá aumentar considerablemente las transacciones por segundo (se estima que a 100,000), reducir los costes por transacción y reducir en un 99.95% el consumo de energía. En fin, aunque todo parece indicar que estos retos no tardarán en ser resueltos, deben ser superados para que tengamos un ambiente seguro, eficiente y fácil de usar. 

El futuro es de la blockchain

A pesar de estas limitantes, estamos viendo una adopción acelerada, con numerosas innovaciones y casos de uso. Incluso ya es parte importante de las agendas de las principales empresas del mundo, incluida en muchos casos entre sus enfoques estratégicos. Y es que, al ayudar a resolver problemas claves para optimizar procesos y tecnologías ya existentes, se convierte en un complemento ideal para pasar a una próxima fase digital. Su algoritmo criptográfico la hace ideal para control y validación de acceso. Su cifrado la hace segura y a prueba de cualquier actividad no autorizada. El registro de datos inmutables la convierte en una base de datos transparente e incorruptible. El registro distribuido en miles de nodos elimina cualquier oportunidad de fraude. La trazabilidad permite rastrear la procedencia de cualquier activo digital, al quedar registradas todas las transacciones. Todas estas características aportan un gran valor que permite automatizar procesos y realizar operaciones con mayor eficiencia y velocidad, reduciendo costos y tiempo. Sin duda, es la tecnología que está impulsando la nueva generación del internet y será la columna vertebral para las próximas evoluciones. 

Referencias 

1. Voshmgir, Shermin. Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet (p. 88). 

2. Voshmgir, Shermin. Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet (p. 91). 

3. Voshmgir, Shermin. Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet (p. 92). 

4. Buterin, Vitalik, 2022. Soulbound. https://vitalik.ca/ general/2022/01/26/soulbound.html. 

5. Akerlof , George A. y Rachel E. Kranton. «Identity and the Economics of Organizations». Journal of Economic Perspectives (p. 9-32). 

6. Voshmgir, Shermin. Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet (p. 121). 

7. Defi Llama. Defillama.com.
8. Canny, Will, 2022. Jefferies Sees the NFT Market Reaching More Than $80B in Value by 2025. https://www.coindesk.com/business/2022/01/20/ jefferies-sees-the-nft-market-reaching-more-than80-billion-in-value-by-2025/. 

9. Grayscale Research, 2021. The metaverse web 3.0 virtual cloud economies. https://grayscale.com/ wp-content/uploads/2021/11/Grayscale_Metaverse_Report_Nov2021.pdf. 

10. Gartner, 2022. Gartner Predicts 25% of People Will Spend At Least One Hour Per Day in the Metaverse by 2026. https://www.gartner.com/en/newsroom/ press-releases/2022-02-07-gartner-predicts-25-percent-of-people-will-spend-at-least-one-hour-per-dayin-the-metaverse-by-2026. 

11. Blockworks.co, 2022. The Nine Largest Crypto Hacks in 2022. https://blockworks.co/the-ninelargest-crypto-hacks-in-2022/.