GLOBAL N° 60 / Septiembre - Octubre, 2014
La literatura como resistencia.
«Toda la desgracia de los hombres procede de una sola cosa, que es no saber permanecer en reposo en una habitación». Esta es una de las frases más memorables de Pascal y Darío Jaramillo Agudelo la trae a colación en su artículo «La literatura como forma de resistencia, un collage». Plantea el autor colombiano que, ante este mundo veloz, tecnológico e hipercomunicado donde escasea cada vez más la privacidad, la reflexión y el ejercicio literario son cada vez más necesarios. Mientras la sociedad actual parece regirse por pantallas y por toda la parafernalia digital, la literatura está ahí para individualizarnos y acercarnos de una manera real y hermosa al mundo.
La literatura es inherente a nuestra civilización y, por más que una serie de agoreros anuncien su muerte o su desaparición, siempre será la fuente de nuestros sueños y la que narra nuestra historia. De manera más precisa lo expone Rafael Courtoisie en «La poesía como gnoseología», donde explica que todo pensamiento debe expresarse a través del lenguaje y de su semejanza y dinámica con el acto poético.