GLOBAL N° 43 / Noviembre - Diciembre, 2011
La Universidad Henry Christophe.
El 12 de enero de 2012, al cumplirse el segundo aniversario del terremoto que devastó Haití, el gobierno de la República Dominicana hace realidad su compromiso con la recuperación de la nación hermana: la construcción de una nueva universidad.
Esa universidad se ha construido en la segunda ciudad más importante de Haití, Cabo Haitiano, y responde a los planes del Gobierno de ese país de comenzar un proceso de descentralización de su desarrollo que abarca la educación superior.
Desde antes del movimiento sísmico que ocasionó la muerte de 250,000 personas y destruyó buena parte de la riqueza nacional haitiana, la situación de la educación en general, y de la educación superior en particular, era bastante precaria.
La cooperación de la comunidad internacional ofrece una oportunidad para replantearse una transformación del modelo educativo de enseñanza superior vigente en el país que ocupa la parte occidental de la isla Quisqueya.
Para eso Haití cuenta con sus especialistas, los cuales han estudiado de manera rigurosa y seria las potencialidades, debilidades y desafíos del sistema de educación superior haitiano. Algunos de esos especialistas presentan un diagnóstico en este número de la revista Global y expresan sus puntos de vista acerca del futuro de la educación superior en Haití, de sus aspectos normativos, organizativos, institucionales, curriculares, programáticos y de desarrollo de infraestructuras.
Entre esos expertos se encuentran Jean Marie Theodat, catedrático de la Universidad París I, Panteón, Sorbona; Ronald Jean Jacques, profesor de la Universidad del Estado de Haití y miembro de la Comisión de Reforma de esa universidad; Jacky Lumarque, rector de la Universidad Quisqueya, e Yves Voltaire, rector de la Universidad Pública del Sur en Les Cayes.
Además, en esta edición escuchamos las voces de estudiantes universitarios haitianos que valoran la importancia de la educación superior y el compromiso que tienen con el desarrollo de su país. “Los jóvenes haitianos deben ser parte de las soluciones”, es una de las expresiones de Michaëlle Jean, enviada especial de la Unesco a Haití y ex jefa de Estado de Canadá entrevistada en esta edición.
Esperamos que nuestros lectores puedan apreciar el valor y el alcance de los trabajos de estos académicos comprometidos con la transformación del sistema de educación superior de Haití, tan vital para que ese país vecino pueda superar su tradicional situación de miseria y pueda entrar, en el siglo xxi, en una nueva situación de modernización, progreso y prosperidad.
Al igual que en todas partes del mundo, solo la educación podrá contribuir al avance de Haití y confiamos en que con la entrega de la universidad de Cabo Haitiano, la Universidad Henry Christophe, el pueblo dominicano haya podido hacer alguna contribución, aunque sea modesta, a ese anhelando y necesitado proceso de transformación del pueblo de Toussaint Louverture.